Animación a la lectura I

Muchas son las cosas escritas pero, en la realidad, cada niño es un mundo y lo que vale con uno no es suficiente con otro.

Entre todos los consejos que se pueden encontrar el que siempre me ha llamado más la atención es que los niños hacen lo que ven, imitan a sus padres. “Si los padres leen los niños también leerán”. Respecto a esta afirmación yo diría que es importante pero no debe de ir en solitario. Si un papá está leyendo y su hijo o hija se pone al lado a imitarle pero no hay más comunicación puede que el mismo comportamiento lo repita algún que otro día pero, si no obtiene lo que realmente busca, si no hay comunicación sobre los libros, seguramente acabará con ese interés. Entonces, ¿qué tenemos que hacer?.
DEDICAR TIEMPO, invertir en el futuro. Si tenemos la suerte de estar en esa situación debemos emplear tiempo para hablar y preguntar sobre el libro leído, el que estás leyendo tú, de qué trata, si le gusta, etc., etc. y quedar en otro momento u otro día para continuar. A partir de ahí se establecerá un vínculo en el que un día puedes leerle tú, otro te lee a ti, hacéis un dibujo juntos, lo hace él, lo hace de su libro, del tuyo (depende, claro), etc. El niño o la niña verán la lectura como algo que le acerca a mamá o papá, divertido, mágico, entretenido.
Propiciad esos momento y aprovecharlos, suelen ser escasos y tenemos que estar atentos.

Para terminar tengo que compartir lo que me ha ocurrido hoy. Por la mañana me dice un alumno que ayer se le cayó un diente. El Ratoncito Pérez le trajo uno de mis libros. Se despertó a las 6 de la mañana para ir al baño y, cuando lo vio, se puso a leerlo y ¡¡se lo terminó antes de ir a desayunar!!, me he quedado de piedra. (tienen 7 años)
Un saludo